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FACTORES DE RIESGO Y SINTOMATOLOGÍA DEL SÍNDROME DEL OJO SECO
¿Quieres saber si sufres el síndrome del ojo seco? Hoy te explicamos cuáles son los factores de riesgo y síntomas más comunes.
El estilo de vida actual incrementa la incidencia del ojo seco y la repercusión en la calidad de vida de los pacientes.
En los últimos 30 años, se ha pasado progresivamente de mirar papel a mirar imágenes en pantallas. En estos dispositivos, las secuencias que vemos viajan a gran velocidad provocando que el ojo parpadee menos para no perder información. En estas situaciones de fijación prolongada sin parpadeo, la producción lagrimal disminuye, la película lagrimal no se esparce bien por la superficie ocular y aumenta la evaporación.
Hay que tener en cuenta los siguientes factores de riesgo, ya que potencian su aparición:
- Edad avanzada.
- Cirugía láser, ya que elimina los terminales nerviosos más externos de la córnea y altera la curva natural de ésta, incrementando la evaporación en determinadas zonas.
- Desorden alimenticio por déficit vitamínico o por un consumo bajo de pescado azul (omega 3).
- Cambios hormonales, sobre todo en la menopausia.
- Factores ambientales como aires acondicionados, calefacciones que provocan ambientes secos. La contaminación ambiental, alérgenos químicos de la industria o los que pueden contener cosméticos.
- Pantallas de los dispositivos electrónicos durante largos períodos de lectura que hacen que disminuyamos la frecuencia del parpadeo.
- Consumo de determinados fármacos: tratamientos por acné con retinoides por vía oral, anticonceptivos, antihistamínicos y determinados tipos de antihipertensivos, ansiolíticos y antidepresivos, quimioterapia y, sobre todo, el trasplante de células madre coincidiendo con el descenso del tratamiento inmunosupresor.
- Hábitos poco saludables como comer mal ya destiempo, no dormir las horas que toca, no practicar deporte al aire libre, el estrés, el consumo de alcohol y tabaco...
- Enfermedades autoinmunes como artritis reumatoide, síndrome de Sjögren, fibromialgia...
- Diabetes a que afecta a los terminales nerviosos que inervan la córnea, reduciendo la sensibilidad.
Los síntomas más habituales son:
- Ardor o picor.
- Sensación de arena o cuerpo extraño en el ojo.
- Sequedad.
- Necesidad de parpadear más a menudo.
- Visión borrosa.
- Fotofobia (molestia con la luz).
- Pesadez ocular, ojo medio cerrado.
- Lagrimeo.
Si detectas algunos de éstos de forma recurrente te recomendamos que nos visites, podemos ayudarte a mejorar ya prevenir afectaciones más graves.